Me fascinan los detalles arquitectónicos. Hay una gran riqueza de detalles en todo el mundo que pasan completamente desapercibidos y que son marca del anónimo arquitecto que procuró dar un toque de distinción a su obra. A veces, rivalizando con el elemento constructivo no tan glamouroso...
La naturaleza con su belleza siempre brinda oportunidades de ser fotografiada... aunque sean elementos cotidianos.
Y desactivando el autofoco se puede conseguir no molestar a un inquilino, cuando menos, inquietante...
Otro día más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario