domingo, 26 de febrero de 2012

Tristeza...

Creo que es evidente que la actual situación económica de nuestro país es dantesca. Nada que ver con la crisis que hubo a principios de los años noventa. Esta vez, los casos de familias en paro no son historias que te cuenta "alguien que sabe de alguien...", sino que son casos que me cuentan en primera persona. Los últimos, esta semana. Creedme que se me queda cara de tonto.

Hay dos preguntas que me hago: la primera es: ¿cómo hemos llegado a esto? (¿no se supone que estamos en un país "del primer mundo", civilizado y con un potencial económico y social que nos permita sobreponernos?) La segunda es: ¿cómo fue, realmente, la crisis económica del año 1929? ¿Qué casos REALES de dramas personales hubo en aquella época y cómo salieron de semejante situación?

Supongo que el tiempo nos contestará a esto. Entretanto, hay otra cosa que me entristece: ¿no habíamos acabado con los "porrazos"? Me explico: ¿cómo es posible que en pleno siglo XXI estemos asistiendo a una represión policial como la que hubo en la transición? Y es que un servidor ha vivido, en las calles Donostiarras, todo tipo de situaciones de batalla campal. Es más: un servidor ha visto la tanqueta con los cañones de agua que tenía la Policía Nacional en San Sebastián y que llego a utilizar en alguna ocasión. Vamos, que lo de ahora es de claustro de convento de monjas comparado con lo de 1978.

(Abro paréntesis: me ha costado elegir el término comparativo "claustro de convento de monjas" porque he pensado primero en "patio de recreo" y me ha venido a la cabeza la escena final de "La joya del Nilo" en la que se están pegando los "buenos" contra los "malos" y aparece DANNY DE VITO y exclama: "¡Vaya! Esto parece el patio de mi antiguo colegio". Luego he pensado en una guardería y he pensado en "Toy Story 3" en la que la "sala oruga" es la auténtica guerra. Así que, finalmente, se ha impuesto "Sonrisas y Lágrimas" en la que la tranquilidad del convento es patente. Fin del paréntesis).

Así pues, en 1978 y siguientes, ya sufrimos porrazos. Han pasado más de 30 años y volvemos a lo mismo. Estoy comprobando en Twitter y en los medios digitales el cruce de acusaciones: unos diciendo que es necesario y los otros diciendo que la represión policial está injustificada. Lo siento: no me voy a posicionar. Si me pongo de un lado me llamarán fascista, si me pongo del otro, me llamarán desestabilizador antisistema y perroflauta.

En estos momentos nos deberían preocupar otras cosas. Y a mi lo que me importa en estos momentos es que la gasolina se está disparando, que la gente a mi alrededor se está quedando en paro, que mi teléfono no para de sonar y me llama un sudamericano (y no tengo nada en contra de ellos, que conste) para ofrecerme la supermegatarifa que tengo que contratar con ellos y no con otros y un largo etcétera de cosas que no entiendo en pleno siglo XXI.

Y lo más importante: ¿qué mundo estamos haciendo? Hoy, todo lo que os puedo decir, es que las noticias me llenan de profunda tristeza.

domingo, 19 de febrero de 2012

Cuando no procede patalear

Mi pretensión con este blog es la de quejarme de cosas, mal hechas, que nos afectan mucho y que no podemos cambiar ni hacer cambiar porque, como muy bien decía aquel: Las cosas para que se arreglen deben estar jodidas del todo porque medio-jodidas no se arreglan.

Hoy he sufrido una circunstancia que me ha hecho hervir la sangre. Uno de esos más que justificados "pataleos". No obstante, y dada la naturaleza de la circunstancia, esta vez guardaré silencio. A veces la prudencia es mejor recurso. De todas maneras, siempre es bueno decir las cosas. Así pues, intentaré hacer llegar mi pataleo por otros medios que la publicación en un blog.

Es bueno decir las cosas. Es bueno hacerlas llegar a aquellos que pueden cambiar las cosas. A veces podremos, a veces no. Cuando podamos, a veces habrá que buscar el momento, la circunstancia o, incluso, un intermediario que haga llegar los mensajes. Cuando no podamos, ya sabéis: a patalear.

domingo, 12 de febrero de 2012

Yo estoy con Alberto Contador

Desde que salieron en prensa las primeras noticias sobre el posible dopaje del ciclista ALBERTO CONTADOR, he sido muy prudente en cuanto a qué atenerme. Por un lado, me puede el corazón y me emociona ver ganar a uno de los nuestros. Ya con MIGUEL INDURAIN, vibraba con todas y cada una de las victorias que el corredor navarro lograba y que hacíamos propias todos sus seguidores. Por otro lado, un dopaje es cosa muy seria y, además, es poco honrosa ya que es hacer trampa.

Así pues, emoción con las victorias del corredor madrileño, pero con prudencia.

Esta semana ha explotado la situación. El TAS (Tribunal Arbitral del Deporte), condena a Contador a dos años de inhabilitación desde el día en que se produjo el dopaje (el Tour de hace un par de años). Esto hace que se pierda competiciones importantes (sobre todo los JJOO), decisivas para un corredor profesional. Aplicando la misma prudencia en todo el caso, me he dedicado a leer, sobre todo, opiniones de gente con autoridad en el tema para hacerme una idea.

Voy a hacer un inciso, para explicar algo que explico a mis alumnos todos los años: los prefijos en unidades técnicas. En muchos sitios el lector podrá comprobar la siguiente relación:

* Tera: 1000000000000 (diez elevado a 12)
* Giga: 1000000000 (diez elevado a 9)
* Mega: 1000000 (diez elevado a 6)
* Kilo: 1000 (diez elevado a 3)
* deci: 0'1 (diez elevado a -1)
* centi: 0'01 (diez elevado a -2)
* mili: 0'001(diez elevado a -3)
* micro: 0'000001 (diez elevado a -6)
* nano: 0'000000001 (diez elevado a -9)
* pico: 0'000000000001 (diez elevado a -12)

(el lector puede encontrar la tabla más extensa en Wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/Prefijos_del_SI)

Si esta relación la aplicamos al metro, tendríamos, por ejemplo, que un "Kilómetro" son 1000 metros. Un "milímetro" son 0'001 metros (la milésima parte del metro). ¿y un picómetro?

Volviendo al tema del de Pinto, en toda esta historia, la cantidad encontrada de la sustancia dopante es del orden de "pico" algo... Si hiciéramos un control de alcoholemia, las cantidades que se buscan son del orden de gramos de alcohol en sangre. Es decir, 12 órdenes de magnitud superior.

A lo mejor los médicos me rebaten y me dicen que sustancias en muy poca cantidad (del orden de picos) son muy efectivas. O puede que sea un resto muy significativo.

En cualquier caso, el martes apareció una columna en Diario de Navarra, que consiguió aclararme las dudas. Desgraciadamente, no puedo reproducir dicha columna ni poner un link a la misma ya que apareció en la edición impresa (tampoco tengo el ejemplar, ya que lo leí en una cafetería mientras comía... cosas de la vida, ya ve Vd.).

El caso es que el martes leí una columna de JOSE CALABUIG. Este señor, tomó cierto renombre por ser uno de los preparadores médicos de MIGUEL INDURAIN (este nombre ya suena más). El Dr. Calabuig es una autoridad en cuanto a sus comentarios ya que sabe de que se está hablando.

En esa columna, el Dr. Calabuig decía, efectivamente, que la cantidad encontrada de Clembuterol era insignificante como para pensar en un dopping. Decía, también, que el TAS había aplicado la ley sin hacer interpretación de ella y que eso la hacía especialmente dura e injusta (que cosas!). Y por último, me daba pie a pensar en un pequeño dilema:

* Si Alberto Contador se hubiera dopado ¿Vds. creen que se hubiera dejado "coger" tan fácilmente? Seguramente, la prevención hubiera sido minuciosa y no hubieran detectado nada en los análisis, ya que era perfectamente consciente de que en un momento u otro le iban a hacer análisis de sangre y orina.

* Si, como ocurrió, le detectan clembuterol en sangre, ¿es signo de dopaje?

Pues yo creo que la clave está en el "pico". Una cantidad tan pequeña es clave para poder creer al ciclista: fue un descuído (descuído que, por cierto, no debería pasarle a un ciclista profesional como él).

En definitiva. Después de todos estos razonamientos, yo estoy con Alberto Contador. La propaganda negativa contra deportistas españoles que ha aparecido en los medios de comunicación franceses es otro argumento para creer en la inocencia de Alberto. Deseo que esto acabe bien para nuestro ciclismo y que Contador pueda seguir cosechando victorias (y que también las coseche Gasol, y Nadal, y Alonso, y...).

domingo, 5 de febrero de 2012

Euskadi Tropikal

Euskadi es tierra costera. Los tamarindos pueblan el paseo de la Concha en San Sebastián. La gente disfruta de la playa. En Bilbao, los turistas visitan el museo Guggenheim paseando por la margen del Nervión. Propios y extraños, se dedican al turismo rural por los bellos montes vascos. Todo bajo un tiempo maravilloso. Nunca nieva. Nunca llueve.

Así pues, es normal que un 3 de Febrero, uno lea en el diario local (en mi caso, El Diario de Navarra), que la autovía A-1 está bloqueada ya que un camión hizo "la tijera" debido a las inclemencias meteorológicas. Y es que, claro, nadie se espera que en Euskadi pueda llover o nevar de manera intensa. Nunca llueve, nunca nieva. Así, año tras año, las carreteras se bloquean.

Al menos en tres ocasiones, un servidor ha estado bloqueado en la A-15 o en la A-1 entre tres y cuatro horas por la incompetencia de los que piensan que Euskadi es un país Tropikal (así, con "k"). Es vital para la economía de cualquier país tener unas infraestructuras eficaces. Es vital que los que gobiernan (sean del signo político que sean) organicen estas cosas con eficacia. El viernes recorrí unos diez kilómetros de la Autovía del Camino que une Pamplona y Logroño. En dicho trayecto vi tres quitanieves. ¿tan difícil es organizar eficazmente AÑO TRAS AÑO un operativo que permita circular por nuestras carreteras? ¿tan difícil es concienciar a los camioneros que no vayan a toda velocidad cuando nieva? Un servidor ha conducido mucho por nieve y siempre le he tenido respeto al blanco elemento, es decir, ni voy por ella a todo lo que da el coche ni me paraliza como a algunos (no es bueno ni lo uno ni lo otro). Hay que tenerle respeto a la nieve y hay que conducir con la seguridad que el vehículo y las condiciones requieran. Digo esto porque he visto a camioneros ir a toda leche mientras nieva a todo trapo y eso es lo que siempre corta las carreteras.

Pues eso: que todos los años pase lo mismo es signo de ineficacia. Prudencia con la nieve. Organizar operativos eficaces por parte de nuestros políticos es lo que me hace patalear hoy.