Bronca instructiva

Una de las cosas que más me cabrea es encontrarme un coche mal aparcado. Yo suelo decir que son coches que se dejan "tirados". Como cuando dejamos la cazadora en el sofá al llegar a casa: la lanzamos y no nos preocupamos ni de como queda.

Soy un gran coleccionista de coches mal aparcados. Gracias a la magia de la última generación de teléfonos móviles, uno lleva la cámara de fotos a cuestas y le permiten obtener instantáneas como estas:

Considero a este tipo de gente de lo más insolidario que uno se puede encontrar. Siempre me he preguntado las razones que llevan a estos conductores a aparcar (o mejor: a NO aparcar) así. Realmente hay que pasar de absolutamente todo y no pensar en absoluto en los demás.

El pasado jueves tuve ocasión de tener una bronca con uno de estos sujetos. Y he dado un paso en la comprensión de las razones que tienen en aparcar como les viene en gana.

Ese día tuve que hacer una gestión en un barrio de Pamplona y llegué a una zona de aparcamiento con coches aparcados en batería junto a una zona de coches aparcados en línea. Siempre es más cómodo aparcar en batería (ya que no hay que hacer maniobra al llegar y se desaparca en una sola maniobra) que hacerlo en línea en donde siempre hay un par de maniobras al aparcar y desaparcar.


Así pues, me dirigí a la única plaza que quedaba libre en batería y descubrí que el coche de la derecha (un BMW X3 para más señas) estaba aparcado sobre la línea dejándome el espacio justo para estacionar mi coche. Aparqué entre las dos líneas al lado de la castaña de BMW (el término castaña lo aclararé en una entrada futura de mi blog, aunque el lector puede ir viendo el capítulo correspondiente de Top Gear:

).

Así bien aparcado, me bajé del coche y comprobé que estaba bien estacionado entre las dos líneas. Comprobé que no tocaba a nadie y me dispuse a hacer mis gestiones. En ese momento se baja la ventanilla del BMW y una señora me increpa:

"¡Señor, señor!" (iba yo con traje y corbata). "¿Le importa mover su coche? Es que no puedo salir."

Atentos a esta petición. Todo lo que viene a continuación se basa en ella. Mucho cuidado con lo que nos piden porque puede ser una trampa. Y en este caso, se está pidiendo colaborar con una situación mala de partida: un coche mal aparcado y la colaboración en seguir justificando un mal aparcamiento con otro mal aparcamiento.

Yo miré en el lado derecho del BMW y le contesté a la señora:

"Muévalo Vd. que tiene el coche encima de la raya y tiene muchísimo espacio en la parte derecha". 

Es decir: que no entro al trapo y le hago ver que "no me chupo el dedo". Sigue insistiendo la señora:

"¡Pero que mal genio! ¿Qué le cuesta mover su coche?".

Yo sigo sin entrar al trapo:

"Mire señora: las plazas de los coches vienen delimitadas por rayas en el suelo que nos indican como tenemos que aparcar. Están puestas así para que haya sitio suficiente para todos. Insisto en que la que tiene que mover el coche es Vd."

La señora en sus trece y empezando a utilizar la compasión como argumento:

"Es que tengo la espalda mal y luego tengo que abrir las puertas del otro lado y necesito espacio".

Yo no me bajo del burro:

"Pues si quiere espacio, aparque aquí detrás en línea y no tendrá esos problemas".

Ella en sus trece:

"Es que allí me ponen coches en doble fila y tengo que esperar a salir. Mueva el coche (sólo le faltó decir "¡Jo!").

Como tenía prisa me subí en mi coche, lo moví de mala gana y le dejé espacio para salir. Me bajé sin mirarla y me gritó mientras me iba:

"¡Qué mal genio! ¡Qué maleducado! ¡Qué le costaba!"

Yo le contesté:

"Señora: lo que tiene que hacer es comprarse un parking y aparcar en donde le venga en gana". 

Y allí la dejé.

Concluyendo: Una situación injusta de partida. Una petición para colaborar con dicha injusticia. Uno hace las cosas bien y encima quedo como un inmisericorde maleducado.

Sin embargo, quiero hacer notar que a veces es conveniente quedar mal y hacer notar a la gente que hay que respetar las normas (las líneas en este caso) que poner buena cara y dejar que la gente se salga con la suya. Precisamente hoy tenía pensado escribir sobre el último partido de ZINEDINE ZIDANE en donde es palpable la reacción a una prolongada injusticia. La contrapartida es que siempre quedamos como "los malos" cuando ponemos fin a la injusticia.

El episodio que relato es una chiquillada. Uno lo piensa con perspectiva y la verdad es que es una reacción desmesurada ante una tontería. No obstante, que le sirva a lector para saber que diariamente nos cuelan cosas malas como buenas y, por no saber decir "basta", nos tragamos las injusticias.

Para terminar, aquí van unas fotos del BMW X3. El Focus que aparece en una de ellas es mi tartana (¡larga vida!).